¡Hola! ¡Aquí está Hime de nuevo! (*auto-ovación que resuena
en el vacío*)
El honor de hoy se debe a que tengo que deciros algo, y lo voy
a soltar así rápidamente, sin dar rodeos, yendo directamente al grano, como
hace esta gente que suelta algo y, ale, como caiga; como cuando quitas un
esparadrapo que has pegado por… por… por… Pues eso, que dejo el blog.
Sé que esta noticia os extraña, porque ya habéis visto que
llevo un año más activa que nunca, pero, tranquilos, no os preocupéis, que os
voy a dejar en buenas manos: hay por aquí una chiquita, Etsuko (creo que se
llama), no sé si la conocéis, y a la que he encomendado la dura tarea de
continuar mi legado, tan activo y aplaudido en los últimos meses, como tan bien
sabéis. Si es que las hazañas del César, en la memoria quedan, ¿verdad?
Bueno, ya algo más en
serio, lo que quería es daros las gracias a todos los que me habéis estado leyendo durante estos tres años y algo, los que habéis mostrado interés en decirme cualquier cosa y
especialmente a Etsuko, por haber querido hacer un blog conmigo, haberme
aguantado durante tanto tiempo y no dado una merecida patada en las posaderas, sobre todo últimamente. Gracias, gracias, gracias :)
Y como sé que a estas alturas del post ya todos
os acordáis de mi (“Ah, sí, sí, ésta es la pesada aquélla”) y que sabéis quien
soy (“¿Pero este blog lo llevaban dos?”) os comunico que a partir de ahora dejo
de ser Hime para transformarme cual travesti en Manolo (*inserte voz de camionero
aquí*), de ahí mi nuevo pseudónimo, ℳ, y
que me podéis seguir leyendo en Mandarina’s, un blog que, aunque hasta ahora ha
sido un tanto monotemático y aburrido, en cuanto me dejen de tirar los puntos
de la operación de cambio de sexo, digo de personalidad, irá alumbrando cos- -
- . >>Fin de la auto-publicidad. Inserte moneda para continuar.<<
Así que, lo dicho, que ha sido un placer estar aquí, escribir para vosotros y, nada, por lo demás, si queréis, ya sabéis donde encontrarme ;)
No hay comentarios:
Publicar un comentario